Laberinto dibujado por Mireia Villas |
Cómo todos sabemos, en el antiguo egipcio los reyes y reinas mandaban a los esclavos más mayores y más pequeños trabajar. Separaban a los esclavos en grupos; por edad y fuerza.
Zaid era un niño de apenas 9 años que desde que tenía 2 ya trabajaba para la reina Cleopatra haciendo pirámides, templos, esfinges, plantando en el huerto real, etc. El niño, como apenas tenía para comer, estaba muy débil, así que les pusieron en el grupo de agricultura. Pero como no tenía suficiente fuerza se desmayo, así que los soldados que vigilaban lo cogieron y lo llevaron a la enfermería. Allí le bañaron, le dieron de comer, y le dejaron descansar. Pero porque era un niño y era el futuro, porque había mucha gente más mayor a la que no le hacían eso, y era raro que lo hicieran. Cuando acabo el día Zaid se fue a descansar a su casa con sus hermanos y padres. Al día siguiente Zaid se encontraba mucho mejor y estaba yendo hacía el grupo de construcción que era el que hoy le tocaba para empezar a trabajar. Cuando de repente se paro delante de una esfinge que el mismo había construido. En el pie de la esfinge los muones no eran iguales y el juraría que habían puesto los mismos. Así que con esa inquietud se acercó y vio que los muones estaban como sueltos, no estaban pegados, los apartó y de repente encontró una entrada, era un túnel. Este niño, quien había construido la esfinge, ahora encontraba un túnel del que desconocía su existencia, fue el primero en descubrir-lo antes de los investigadores que unos siglos después lo encontraría.
Zaid con la emoción que llevaba empezó a recorrer ese túnel. Era extraño, tenía luz, ¿habría alguien más allí dentro? Después de mucho rato andando se dio cuenta de que era un laberinto, puesto que había caminos sin salidas y muchos caminos que elegir. También habían trampas, así que iba con cuidado, ya que se había pegado más de un susto. Después de un rato entró en una sala grande hecha de oro y piedras preciosas, allí había un tumba, la abrió para ver que había dentro. Estaba llena de piedras preciosas. Él las empezó a coger pensando en su familia pero fue tan estúpido que no se dio cuenta de que era una trampa. La sala se empezó a llenar de arena, hasta que él no pudo respirar y se ahogó. Desde entonces ese túnel dicen que esta maldecido por la maldición del esfinge.
Zaid con la emoción que llevaba empezó a recorrer ese túnel. Era extraño, tenía luz, ¿habría alguien más allí dentro? Después de mucho rato andando se dio cuenta de que era un laberinto, puesto que había caminos sin salidas y muchos caminos que elegir. También habían trampas, así que iba con cuidado, ya que se había pegado más de un susto. Después de un rato entró en una sala grande hecha de oro y piedras preciosas, allí había un tumba, la abrió para ver que había dentro. Estaba llena de piedras preciosas. Él las empezó a coger pensando en su familia pero fue tan estúpido que no se dio cuenta de que era una trampa. La sala se empezó a llenar de arena, hasta que él no pudo respirar y se ahogó. Desde entonces ese túnel dicen que esta maldecido por la maldición del esfinge.
1 comentario:
Mireia, tu laberinto es muy bueno. La historia, también. Está bien ambientada y la estructura es correcta. Has de cuidar la ortografía. Y sobre todo, utilizar los signos de puntuación bien.
Corrige la ortografía.
Publicar un comentario