Rubia, bajita y de unos setenta años, así es ella. En este
caso no estamos hablando de mi madre, que obviamente es un ejemplar para mi y
una de las mejores personas en mi vida, pero no os estoy hablando de ella, sino
de mi abuela.
Aquella mujer la cual no deja que nadie de los de su
alrededor se hundan, la señora más fuerte que alguien puede conocer hoy en día.
Ella, ha luchado y a hecho todo lo posible para sacar a su familia hacia
delante, por muy difícil que sean ciertas circunstancias, ella ha estado ahí,
dando su punto de apoyo y su ayuda, sin ni si quiera haber sido pedida.
Fue capaz de cuidarme a mí desde que era pequeña, y aun así,
en una de las épocas más complicadas de la vida, la adolescencia, está ahí para
soportarme y procurar que no me tuerza, preocupándose por mí.
Tiene un carácter algo diferente, es decir, tiene mucho
genio, pero a la vez es la persona más cariñosa que puede haber. Es
interesante, simplemente, es especial. Ante cualquier problema, te ayudará y
aconsejará como nadie más lo puede hacer. Te corregirá si hiciste algo mal. Y
lo más importante, te ayudará y te querrá con todas las fuerzas que ella tenga.
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